:Beyblade XBattle: Capitulo 7

Los Eximius estaban en su sala de descanso con su entrenadora y su apoyo el director, según el reglamento aquel día se llevarían a cabo dos encuentros, el segundo día otros dos y el último sería la batalla decisiva, estaban descansando en lo que algún miembro del staff les anunciaba quien sería el siguiente en la línea de combate, como era de esperarse todos estaban nerviosos con una derrota tenían que mejorar sus habilidades considerablemente si querían tener alguna oportunidad para ganar su lugar en el campeonato.

Se escucharon tres golpes en la puerta y el director abrió, al cerrar la puerta tenía un pedazo de papel entre sus manos y todos esperaban a que dijera algo…

-Thiago…- dijo después de abrir el mensaje y el gemelo de las mangas largas y cabello oscuro dio un paso adelante.

-¡Bien! Tenías razón Osiel- exclamó el hermano gemelo.

-¡Tú puedes hacerlo!- le animó Rikuto después volteó a  ver a su entrenadora que los miraba con los brazos cruzados.

-Kalet…- dijo ella, sus pupilos entendieron y se acercaron mutuamente era hora de hablar en serio.

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-¡Un gran aplauso para el único e inigualable Rey! – grito DJ. Jazzman, se encontraban en el estadio Seaside, en los cuartos de final del torneo nacional, donde se enfrentarían Takao y el invicto y misterioso Rey, este apareció por los pasillos lentamente y seguro de sí mismo, se veía aburrido y desinteresado en la batalla que le sobrevenía:

-¡Oye!- le llamó Takao quien ya se encontraba allí -¿Por qué estas bostezando?- le reclamó después de que el chino hiciera tal gesto

-¿Ah? Disculpa no te había visto ¿Podemos terminar con esto de una vez?- dijo Rey con su tono cansado y despreocupado

-Un sujeto listo ¿Eh? – dijo Takao irritado

Haruko, Max,  y el padre del chico miraban desde las gradas, podía verse que la chica tenía una cara extraña, como de esas que pones cuando te incomoda la actitud de otra persona:

-Valla Rey es muy seguro de sí mismo…- comentó el rubio alegremente

-También me parece que habla demasiado…- comentó su padre, Haruko asintió rápidamente estando de acuerdo.

-Demasiado para el gusto de algunos…- dijo la chica evitando voltear a ver al chico de cabello negro y largo.

-Debes admitir que se ve muy bien haciéndolo…- le dijo Max para intentar calmarla

-Hmmmm- exclamó ella cruzándose de brazos mientras miraba la batalla de su amigo y el chico invicto y creído que lanzaba su poderosa Bestia Bit hacía el Dragoon de Takao, y entonces con un gran zarpazo de garra de tigre el Beyblade de Takao salió del plato destrozado, incapaz de poder continuar sin un Beyblade, los tres amigos esperaban un milagro y así Kenny llegó corriendo:

-¡No tan rápido!- gritó llamando la atención de todos

-¡Es Kenny!- dijo Haruko feliz y se levantó de su asiento para acompañar a sus dos amigos a los casilleros, Max la miro y de igual modo Kai se volteó a verla mientras pasaba corriendo por su asiento un poco más arriba.

Salió a los pasillos del estadio y se dispuso a buscar a Takao y Kenny antes que fuera demasiado tarde, corría para encontrar a sus amigos a tiempo y de la nada algo impidió que siguiera corriendo y ella llegó a tocar el piso:

-Debo ser más cuidadosa…- susurró para sí misma pensando que había topado con una pared o algo parecido, adolorida por la manera en la que cayó al suelo 

-Valla… Lo siento tanto, no me fije por donde caminaba…- dijo alguien tendiéndole un brazo envuelto en vendajes blancos.

-¿Pero qué…?- se preguntó ella sorprendida al ver al chico que tenía facciones gatunas tendiéndole una mano con una expresión preocupada al ver que ella estaba en el suelo y rápidamente ella dedujo que había chocado contra el muchacho que en un principio no le causó buena impresión

-¿Te encuentras bien?- dijo de nuevo, ella tomó su mano un poco dudosa y al estar de pie de nuevo asintió –Lo siento de nuevo… Debería ser más cuidadoso- le sonrió, mientras se podía ver en su boca el blanco resplandor de un colmillo afilado,

-También fue mi culpa…- dijo casi inaudible y después de sonreír nuevamente Rey simplemente se fue, ella se le quedo mirando mientras entraba bostezando a su vestidor -¿Qué clase de persona eres Rey Kon?- pensó antes de volver a su búsqueda.

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-Hmmm…- exclamó Haruko mientras sus pupilos le explicaban algo – Así que… Kalet es ese tipo de persona- dijo perdida en sus recuerdos anteriores, los chicos asintieron.

-Aunque no lo conocemos bien… Fue el último en unírsenos antes de que tu llegaras…- confesó Thiago

-¿Ah sí?- dijo la chica y comenzó a divagar – Bueno en ese caso  será un poco más difícil analizarlo… Bien supongo que sabrás improvisar en el momento adecuado – se giró para sonreírle a su pupilo.

-¡Claro que si entrenadora!- dijo el otro animoso e incapaz de esperar su turno, la campana le dio lo que él quería.

-Bueno parece que ya es hora- la entrenadora sonrió y lideró el paso hacía su siguiente batalla.

Esta vez tanto los reflectores como la presentación no fueron tan escandalosos como la vez pasada, los Eximius pasaron a sentarse a la banca, mientras Haruko permanecía en frente de ellos, esperando la señal para comenzar, Haruko miró con el rabillo del ojo al equipo rival:

-Asegúrate de ganar rápidamente... No puedo esperar para ver sus caras de decepción.-dijo el capitán contrario

- Ni lo digas... Tengo esto en mis manos…- le dijo el chico rubio de cabellos esponjosos y ojos azul, casi gris que se preparaba para subir al plato.

-¡Muy bien señoras y señores! Es hora de continuar con este torneo ¿Quiénes serán los siguientes? Veamos- dijo el D.J y señaló la pantalla justo cuando se detuvo en ambas fotografías de Thiago y Kalet

Thiago sonrió una última vez a sus amigos, sin embargo esta vez a su sonrisa animosa y sincera le acompañaba un sentimiento de seguridad y seriedad, alzó el pulgar derecho y se dirigió hacia el plato, saco unos guantes grises de su bolsillo y se dispuso a acomodárselos en las manos pero algo lo sacó de su concentración, una exclamación o más bien un chillido que parecía de origen femenino, era un grupo de chicas, acomodadas arriba de la banca del equipo contrincante, vestidas de un mismo color naranja opaco que sostenían pancartas, pompones y silbatos:

-¡Vamos Kalet!- decían al unísono, el chico al que iban dirigidas las ovaciones solo se giró sonrió y guiño un ojo hacía su grupo de admiradoras quienes duplicaron el volumen de sus chillidos.

En la banca de los Eximius, todos estaban que no se lo creían ¿Acaso se estaban tomando aquello en serio?, Haruko, podía admitir que aquello era una escena familiar, pero la actitud que tomó el muchacho rival era una que ella no aguantaba y simplemente se golpeó la frente con la palma de la mano:

-¡Oye D.J!- gritó Haruko al muchacho –Es hora de comenzar esto ¿No lo crees?

-Eh… Si… Ehmm ¿Kalet?- se dirigió al chico que estaba saludando e interactuaba con sus porristas personales

-¿Eh?- Pregunto el muchacho volteado fingiendo confusión

-¿Te importaría?-dijo el D.J señalando el plato al cual debía subir

-Ah claro…- dijo despreocupado y subió a su lugar, no sin antes mandar un último beso a sus admiradoras quienes casi se desmallan de la emoción

-Esto es imposible…- dijo Haruko irritada mientras ambos chicos se lanzaban  sonrisas fulminantes el uno al otro cuando acomodaron sus beyblades en sus lanzadores

-¡3, 2, 1!- anunció el D.J

-¡Let it rip!- se escuchó en una parte del estadio, se podía notar como las personas estaban cada vez más involucradas en aquello.

Ambos Beyblades cayeron al plato, el de Thiago era muy similar a él, un color rojo vino combinado con un marrón ladrillo, mientras que el beyblade de Kalet era de un color amarillo pastel combinado con un naranja pastel, Thiago tomo aire y su beyblade se dirigió a dar el primer golpe, Kalet lo sintió:

-Oye tranquilo amigo…- le reclamó a Thiago

-¿Viniste a pelear o a una firma de autógrafos?- comentó Thiago y todo el estadio, excepto las admiradoras del rubio rieron ante su chiste.

-Bien… Como gustes…- dijo él y tomando una bocanada de aire cambio su rostro de niño bonito por un rostro serio –A jugar…- dijo y su beyblade se preparó girando cada vez más rápido mientras Thiago se apresuraba a atacarle nuevamente, reboto con bastante fuerza:

-Así que de eso se trata…- pensó Haruko mirando al chico rubio - ¿Qué más tienes para mi niño bonito?

-Venga Thiago- decía Rikuto

-Si tan solo tuviera una laptop que descifrara sus movimientos- se quejó Osiel y Haruko solo pudo sonreír ese chico sí que era parecido a Kenny…

Thiago seguía atacando al Beyblade amarillo y naranja sin embargo el otro parecía inmutarse…

-¡Gahh!- se quejó Thiago incapaz se romper la defensa de Kalet quien inclusive se había tomado la molestia de posar para su grupo de admiradoras.

-¿Qué? ¿Sigues con eso?- le dijo Kalet –Me estoy aburriendo… Y pensé que eras más rudo…

-Suficiente… - dijo Thiago harto -¡Es suficiente!- dijo y entonces cargo su Beyblade a todo lo que pudo, y Haruko pudo notar que Kalet sonreía, pero no era una sonrisa si quiera similar a la de Noah, no, esta sonrisa tenía satisfacción y orgullo… ¿Orgullo por el enemigo?

-¿Qué ocultas?- pensó Haruko poniéndole especial atención al muchacho rubio, de quien el beyblade dejo ir su defensa segundos antes que el beyblade de Thiago llegara ante él, lo que marco la victoria de los Eximius quienes celebraron el logro del muchacho:

-¡Sí!- dijeron todos, pero había algo en la mirada del chico de cabello vino que no dejaba que su entrenadora celebrara tan alegremente como sus pupilos. Sin embargo otra persona tampoco estaba tranquila con lo que ocurría:

 -Pensé que habías dicho que tenías todo en “Tus manos”…- le reprocho Kenta a su amigo

-¿Quién dice que no lo tengo?- dijo Kalet sin ver a su capitán mientras sonreía y mandaba saludos y besos a sus admiradoras.

-¡No tienes remedio!- dijo Kenta y se alejó refunfuñando de ahí.

-No, mí querido capitán… Tu eres el que necesita un remedio…- susurró seriamente y después posó para una foto que le tomo una chica de su grupo de admiradoras.

Thiago se acercó y todos sus amigos lo llenaron de felicitaciones y ovaciones:

-¡Si puedes repetir aquello ya estaremos empatados!- le dijo Rikuto feliz y orgulloso

-¡Bien hecho hermano!- le aclamó su hermano y Thiago intentó sonreír pero esta vez su sonrisa no convenció a su entrenadora.

-Thiago…- le llamó Haruko y él fue a detenerse a lado de ella -¿Pasa algo?- le preguntó

-Claro que no… ¿Por qué lo dices?-  le preguntó un poco nervioso después de voltear a ver a sus compañeros con una cara confundida después de que la chica preguntara.

-Bien…- dijo ella y se dispuso a sentarse a esperar los 15 minutos de descanso de reglamento.

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Haruko despertó, tenía el sueño un poco ligero y solía despertarse ante él más mínimo sonido o movimiento, pudo deducir que alguien estaba despierto y merodeaba por él pasillo de las habitaciones, donde se hospedaban los Blade Breakers para el campeonato asiático de Beyblade, era obvio que ella tenía una habitación propia sin embargo era contigua  la de sus compañeros de equipo y en caso de que se sintiera sola, la computadora de su amigo Kenny siempre le haría buena compañía. Casi instantáneamente supo quién era el que se encontraba merodeando los pasillos, se levantó de la cama, haciendo a un lado las cobijas, se puso sus botas y abrió la puerta:

-Rey- llamó la atención del muchacho que se encontraba mirando a la noche, tapada por nubes, con su pijama azul marino y su cabello negro alborotado sin la bandana roja que solía utilizar

-Haru…- dijo él volteando a ver a la chica  con su pijama gris que lo miraba confundida desde el marco de la puerta de su habitación.

-¿Estas bien? - pregunto ella  saliendo por completo de la habitación, cerrando la puerta a su paso y reuniéndose con él en el barandal, Rey suspiró, no sería capaz de ocultarle algo a esa niña - Son tus excompañeros de equipo ¿Eh?

-Me odian ¿No es así?- preguntó él un tanto triste

-Bueno ¿Les has dado razones para hacerlo?- pregunto ella, Haruko podía sentir que el chico se estaba guardando muchas cosas en el interior, lo que le causaba varias dudas existenciales y no le dejaban estar en paz consigo mismo

-Pues…- Rey suspiró de nuevo – Yo…Podría decirse que desaparecí un tiempo…- se encogió de hombros – Me imagino que no lo tomaron de buena manera…-

-Oh ya veo… - dijo – Sin embargo creo que te tienen mucho cariño… De no ser así no se comportarían de esa manera- dijo para calmar a su amigo

-¿Eso crees?- preguntó con un tono de esperanza en su vos

-Bueno es lo que puedo imaginar… No los conozco tanto como tu… Tú dime…- le sonrió, Rey devolvió la sonrisa y supo que la chica estaba ahí para escuchar todo lo que tuviera que decir.

-¿Te gustaría escuchar la historia de mi barrio y de mis antiguos amigos?-

-Sería un honor- le dijo ella y se volteó para recargar la espalda en el barandal y escuchar con mayor comodidad la historia del chico.

-Mi barrio era pequeño…Un lugar cerrado al exterior igualmente tenía una cultura un poco arraigada, las únicas personas que tenía eran Lee, Mao, Kevin y Gary… Mao siempre fue de gran apoyo para mí, era como una hermana una chica ruda que se ganó mi respeto y el de todos en la aldea al controlar a su Galux...

-Eso es admirable…- era algo que ella no pudo evitar decir

-¿Eh?- preguntó el chico un tanto confundido           

-Eh este… - dijo un poco nerviosa ya que no quería interrumpir a Rey

-Bueno… Es que… Me gustaría ser siquiera la mitad de fuerte de lo que es ella…- dijo encogiéndose de hombros – Pero bueno no me hagas mucho caso… Continua…- hizo un ademan con las manos para que Rey continuara su relato, el muchacho sonrió y volteó su vista a las nubes para continuar hablando

 -Lee es su hermano mayor y siempre existió una rivalidad amistosa entre ambos… Todo cambio cuando su abuelo el líder de la aldea, decidió darme a Driger, la bestia sagrada de la familia a mi… Supongo que en parte siempre me tuvo rencor…- dijo Rey  pero de la nada ambos voltearon instantáneamente al escuchar el ruido de algo rompiéndose, algo de vidrio o de porcelana.

 -¡Regresa aquí y devuélveme mis datos!- escucharon una voz familiar

-¡Kenny!-  dijo Haruko y después volteó a ver a Rey, descifró su mirada y ambos sabían que debían hacer.

-¡Rey!- exclamó Haruko al ver al chico gato llegar con Max y Takao y de inmediato se dirigió a darle un gran abrazo.

-Me imagino que te he preocupado a ti también…- dijo con una voz enternecida, ya que la chica le hacía recordar a su amiga de la infancia. – Perdona y gracias…- volvió a decir antes que los demás Blade Breakers lo atraparan en un abrazo grupal. 

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-¡Es hora de continuar con esto damas y caballeros!- anunció el D.J, lo que cuso que Haruko despertara de su pequeño transe para mirar a ambos muchachos subir de nuevo al plato, de nuevo pudo notar esa mirada en Thiago que no la dejaba estar tranquila.

-¡Let it rip!- se escuchó después de la reglamentaria cuenta regresiva, y ambos Beyblades volvieron a volar al plato.

En cuanto se encontraron ambos crearon una gran ola de poder  y rebotaron fuertemente para regresar al plato y girar por unos breves momentos antes de volver a golpearse al uno al otro a plato, y entonces sin dudar ni un solo momento el beyblade amarillo pastel se cargó a todo lo que pudo hacia el beyblade de Thiago y así como comenzó, el encuentro termino. El beyblade vino de Thiago estaba afuera del estadio, e incluso despedía unas partículas de polvo y humo del gran impacto que acababa de recibir, Kalet solo recogió su Beyblade:

-Bien eso le enseñara…- pensó mientras miraba a Thiago y sus amigos, después volteó para saludar a sus admiradoras quienes estaban a punto de un ataque cardiaco debido a la felicidad de ver a su ídolo ganando, de nuevo alguien interrumpió:

-¡¿Si podías hacer eso tan fácilmente, porque no lo hiciste desde un principio?!- le gritó su capitán

-Te lo he dicho ya, Kenta… Tengo todo en mis manos…- le dijo un poco irritado- Ahora si me disculpas…- dijo y volvió con sus admiradoras

-¿Qué crees que planea?- le dijo Eitan al otro chico que estaba ahí de cabello purpura

-Ese Kalet es un misterio…- le contestó mientras veía con peculiar interés a su compañero de equipo, quien solo sonreía y complacía los pedidos de las chicas que aclamaban su nombre.

De igual manera la entrenadora de los Eximius miraba al chico rubio intentando descifrar sus movimientos:

-¿Exactamente que está haciendo?- se preguntó así misma mientras los demás chicos buscaban las palabras adecuadas para darle alientos a su amigo, pensaba y pensaba sin prestarle atención a la conversación de los demás, de la nada al ver la sonrisa de Kalet se le vino a la mente algo y dejo salir un ligero jadeo al sorprenderse por la idea que a ella misma se le ocurrió – Es imposible…- negó con la cabeza, aquella era una suposición un poco absurda -¿Por qué lo haría?- dijo volteando a ver al muchacho con la cabeza confusa… -Kalet… ¿Dejaste ganar a Thiago?- después volteo a ver al chico últimamente mencionado –Thiago… Lo has notado…- pensó y notó que a pesar de que sus compañeros lo animaban y le daban palabras de aliento el chico no se inmutaba y permanecía mirando su beyblade igual de confuso que su entrenadora.

Lo que nadie podía notar entre tanta sonrisa coqueta que lanzaba Kalet era la manera en la que miraba a sus compañeros de equipo, tensos, incluso se veía que estaban disgustados de estar ahí, parecía que esperaban su turno para subir al matadero, después volteaba a ver a los “oponentes”, felices incluso después de perder… Animándose el uno al otro en cada batalla, eso era lo que él anhelaba antes de unirse al Beblade un equipo… Y lo más importante amigos con los que pudiera disfrutar el deporte que tanto le gustaba…

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Haruko caminaba… Hacia un rato que había dejado la casa de su amigo Takao, después de que Kai volviera haciendo gestos que era el equivalente del chico a refunfuñar, después Kai le contó de sus sospechas acerca de su otro compañero Rey y que a pesar de sus palabras y regaños, esté seguía convencido de que podía confiar en Salima… Chica cercana a sus examigos y ahora oponentes del equipo Psykick. Ella después de notar el brusco cambio de temperatura decidió salir de casa alegando que se había olvidado de algo en casa de Takao y así se vio caminando, buscando el puente que había mencionado Kai, caminaba con sus botas gris oscuro, sus jeans ajustados y una chaqueta gris que tenía un gran gorro de felpa, su cabello atado en una coleta hacia un lado con un moño verde agua mientras cargaba un pequeño morral verde que tomaba con ambas manos:

-Rey…- llamó una vez encontró a su amigo, encogido, sentado en un borde del puente con los ojos cerrados, si algo era propio de Rey era alejar los malos pensamientos con un poco de meditación, sin embargo el frio era algo que aún le vencía.

-Haruko… - dijo sorprendido al ver a la chica en frente de él, después el chico frunció el ceño y volteó cruzándose de brazos - ¿Kai te ha pedido que me convenzas de luchar contra los Psykick? – dijo molesto – Él debería saber más que esto…- seguía refunfuñando para sí y no se dio cuenta que la chica abrió su morral y en esos momentos se encontraba cubriéndole con una manta azul marino, el chico la miró confundido

-El clima está enfriando... Y no me importa que tengas tu meditación, no pienso dejarte congelándote aquí en el frio mientras esperas a una amiga…- dijo ella sonriendo, el no pudo más que bajar los ojos avergonzado.

-Haru…- exclamó agradecido con ella

-Kai me lo ha dicho todo… Pero considero que todos tendrán su versión de la historia… Él sigue molesto por lo que ocurrió con Wyatt, no pienso culparlo… Así como tampoco pienso culparte a ti por confiar en Salima…- le dijo mientras se sentaba justo a él, sacando un termo y sirviendo dos tazas de un chocolate caliente.

-Es que…- comenzó Rey, siempre era tan fácil hablar con ella – Pienso que en verdad se preocupa por sus amigos…  Piensa hacer todo lo que este en sus manos para salvarlos de ese Doctor B… La comprendo… Yo haría lo mismo por cualquiera de ustedes…- dijo tomando un sorbo de la bebida que le había dado Haruko - ¡Esto está muy bueno!- dijo feliz, ella se dispuso a levantarse

-En ese caso… Toma… Lo necesitaras…- le puso el termo a un lado y otra taza desechable – Yo debo irme… Mis padres me mataran si llego más tarde y descubren que no estoy en casa de Takao…- dijo con una cara de miedo – En fin… No esperes demasiado ¿Si Rey? - le dijo y el muchacho asintió sonriendo antes de que ella se alejara hacia la calle iluminada por los faroles de luz y las estrellas de la noche.

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-Me pregunto…- decía Haruko mientras recordaba -¿Pensarás igual a Salima? – volvió a pensar mientras miraba a los dos chicos subir de nuevo a su puesto en el plato de batalla, Thiago se veía decidido, al igual que su oponente sus sonrisas de chico divertido y chico coqueto habían desaparecido por completo y se podía ver mientras se miraban el uno al otro.

Y así después de la señal los Beyblades salieron disparados golpeándose el uno al otro insistentemente, esta vez ninguno se guardó nada y se podían observar las chispas salidas de los Beyblades al chocar y mantenerse allí.

-Vamos hazlo… ¿Qué esperas?- pensaba Kalet para sí mismo

-No estás dando todo de ti… ¿Por qué? No pienso ganar de esta manera…- dijo Thiago y en eso el resplandor de un par de ojos sumergidos en la oscuridad lo hizo saltar de la sorpresa. Kalet lo noto también y entonces.

-¡Ve!- gritaron los dos al mismo tiempo mientras sus Beyblades salían con toda la velocidad que era necesaria para ganar, otro resplandor se pudo ver mientras chispas volaban por los aires.

-¿Esto es?-

-¡No puede ser!-

-Pues lo es…- se escuchó

-¡Los Eximius han ganado esta contienda!- gritó el D.J y los miembros del equipo ya mencionado saltaron a felicitar a su amigo.

-Lo hecho, hecho esta…- dijo Kalet recogiendo su Beyblade, mientras dedicaba una mirada reconfortante a sus admiradoras y salía caminando pacíficamente del Beyestadio, desde luego lidiar con Kenta en aquella situación no sería de su agrado… Haruko sin dudar un segundo salió corriendo dejando a sus pupilos confundidos, pero de inmediato la siguieron, Thiago volteó una última vez, otra vez los ojos iluminados entre mucha oscuridad llamaron su atención sin embargo raídamente dejo el pensamiento a un lado y Siguió a sus compañeros por los pasillos que seguían a su entrenadora:

-¡Tu!- llamó Haruko una vez encontró a Kalet, este volteó.

-Ah… Haruko ¿Verdad?- ella solo se lo quedo viendo - ¿Qué sucede acaso quieres un autógrafo?- ella casi se cae de la sorpresa, ese chico era una broma ¿O qué?- ¿Quieres saber por qué deje que Thiago ganara el primer round? – ella no pudo decirle nada – Ustedes son los que merecen ganar… Mi equipo tiene una idea errónea de lo que se trata este deporte… Te explicaría bien la situación pero si te soy honesto ni siquiera yo sé de qué se trata… Como sea… -Se acercó a ella – Espero algún día tener una entrenadora tan buena como tú… Quizá en ese momento yo merezca ir a un campeonato mundial… Y tener un equipo como los otros o tú… Sería divertido…- dijo mientras miraba al horizonte y Haruko lo miraba  

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Disturbios se escuchaban en el Dojo de la familia Kinomiya, golpes y pasos rápidos y pesados se podían escuchar incluso a calles de distancia, los Blade Breakers, Max, Rey , Haruko y Kenny observaban con miedo y dolor empático como la chica castaña le propinaba unos buenos golpes con una katana a su compañero y amigo de la gorra bicolor:

-¡Te estas burlando de mis libros! ¡Toma! – decía Hiromi

-¡No, no lo hagas!- le gritó Takao mientras detenía a la chica de destruir sus historietas y revistas. Eventualmente ella desistió y todos se sentaron igual de confusos. Haruko se dispuso a leer uno de los libros que Hiromi había llevado:

-¿Qué hemos logrado aparte de que Hiromi destruya todas las revistas de Takao?- comentó Rey frustrado

-Eso es una locura- Max dejo salir su risa

-No te reirías si fueran tus historietas…- le recriminó Takao

-Debes admitir que te lo tuviste bien merecido…- le dijo Haruko sin dejar de ver el libro

-Si…- dijo Hiromi con los brazos cruzados

-Bueno pudo haber sido mucho peor… Pudo haberse dedicado a destruir todos mis trofeos de Beyblade…- volvió a comentar Takao resignado

-¡Escuchen!- dijo Kenny mientras todos se acercaban a la laptop que estaba a punto de dar su veredicto

-Después de analizar la información…- se aclaró la voz – Científica de los libros de Hiromi, calcule los mejores equipos basándome en los temperamentos…- dijo la computadora mientras mostraba las imágenes de los cinco chicos – Con la actitud entusiasta de Takao  el compañero adecuado sería Max cuya serena personalidad lo complementa…- dijo y después hizo una pequeña pausa… - Aunque basándome en previas batallas puede que Haruko también sea una buena compañera para él, también considero que sería el complemento perfecto para Kai, Rey o Max, ella puede amoldarse a cualquiera de sus personalidades y formas de batalla…-

- ¿Entonces?- dijo Hiromi

-Pienso que sería una buena idea dejar a Max con Takao, y Que Haruko este conmigo y con Kai… Después de todo el máximo de equipos es de 3, supongo que Kai tampoco tendrá problema con ello- dijo Rey sonriéndole a ella

-¿Estás de acuerdo con eso Takao? – dijo Max al ver que su amigo no tenía una buena cara.

-Si… Eso creo…- dijo al ver la cara iluminada de la chica al estar en el equipo con Rey y Kai

-¡Gracias Rey!- dijo y se abalanzó a darle un abrazo

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Kalet extendió la mano hacía Haruko:

-Entonces… ¿Estamos bien?- dijo Kalet

-Supongo… Pero deberías haber pensado en una mejor alternativa que dejar ganar a Thiago…- estuvo a punto de darle la mano pero una voz enojada la detuvo:

-¿Qué has dicho? ¿¡Me dejaste ganar?!- dijo Thiago enojado y Haruko volteó a ver a su equipo quienes la habían seguido

-Thiago espera…- le dijo Kalet

-¡¿Solo estaba jugando?! ¡Bien entonces jugare contigo!- dijo intentando sacar su Beyblade lleno de frustración pero su hermano y sus amigos le estaban deteniendo y el empujaba y jalaba en contra de todos:

-Thiago Cálmate… ¡Tienes que calmarte! – le decían ellos pero el parecía frustrado y sobre todo humillado, Haruko lo miro y pudo ver todo el enojo que guardaban sus ojos.

-Vete Kalet…- le dijo mientras se ponía en medio de los dos chicos

-Pero entrenadora…- reclamaron los chicos

-Escúchame Thiago… Entiendo cómo te sientes… Pero ahora no es el momento…- le dijo y el muchacho dejo de forcejear – Ahora concéntrate en tu equipo y en estar ahí para cuando ellos lo necesiten… Te necesitan para volver al entrenamiento, no tienen tiempo de estar con otras batallas… - Thiago razono y así Kalet se fue

-Esperare con ansias nuestro reencuentro…- dijo sonriendo y se fue de ahí, Thiago lo miró con decisión en la mirada, mientras sus amigos dudaban en soltarle o no…

-Déjenlo… - ordenó Haruko

-Haruko… En verdad ¿Esto te parece bien?- le dijo un poco molesto

-Todos tenemos nuestras razones para hacer las cosas Thiago… Entiendo a Kalet tiene un sueño… Intento hacer todo lo que estuviera en sus manos para lograrlo… Si bien no estoy de acuerdo en la manera en que lo ha hecho, respeto su empeño en cumplir sus sueños… ¿Acaso no es algo que ustedes harían?- les dijo y todos se pusieron a pensar… -Cada quien tiene razones para hacer las cosas… Primero debemos entender para juzgar a alguien…

-Bien… En ese caso… Espera Kalet, después del campeonato mi siguiente reto será vencerte…- Dijo Thiago mirando el camino que había tomado Kalet para marcharse.

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-Esto no estuvo bien…- decía Haruko mientras miraba a Takao y Daichi recoger sus Beyblades perplejos por haber perdido su primera batalla en contra de Rey y Lee, definitivamente todos habían crecido en los últimos años, ya no eran los niños que se conocieron alguna vez en los torneos preliminares de Japón, y ahora la cosa ya no se resumía a un juego que todos disfrutaban por igual ahora la situación era más complicada al querer probarse cosas los unos a los otros en aquel nuevo campeonato…

-Quizá debimos de haber mandado a Haru…- dijo Hiromi  

-Yo no puedo creer que esto me esté sucediendo…- dijo Takao viendo a su Dragoon

-Créelo Takao… - Rey llamó su atención y Takao lo volteó a ver – No sé qué te ocurrió, no haces más que perder con esa nueva actitud…

-¿¡Mi nueva actitud?!- el chico de la gorra  saltó a la defensiva

-Takao…- dijo Haruko preocupada por ambos chicos

– Tu eres el que nos abandonó y dejo el equipo que era una familia para cada uno de nosotros…- dijo Takao molesto, esta vez Haruko también estuvo de acuerdo con Takao… tanto Rey como Max y Kai los dejaron a su suerte, incluso no dijeron palabra a la chica y ella tuvo que escucharlo de las bocas de Takao y Kenny no se dignaron en darle explicaciones a ella…

-¿Ah sí?- Rey se iba a defender – Te informo que los deje para probarle algo a mí mismo Takao ¿Sabes por qué? Para saber si era lo suficientemente bueno para retarte…- dijo Rey y Haruko lo miró, ¿Cuánto más podría aguantar la chica antes de romperse? Eso estaba por verse…

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Takao salió corriendo después de no aguantar más la mirada intensa que le dedicaba Rey:

-Con que ese es el campeón mundial…- dijo Lee en modo de burla

-¡Wahh!- exclamó Haruko molesta hacía todos, especialmente hacia el capitán de los White Tiger X, Rey intentó llamar su atención y comprendió el error que había cometido… Ella se negó a mirar a Rey a la cara y se limitó a encerrarse en la sala de descanso de los BBA Revolution…

-No deben subestimar a Takao…- Rey, regañó a sus compañeros de equipo  después volteó a ver al pasillo por el cual se habían ido sus excompañeros de equipo –Solo estaba pensando en Takao…- pensó – Pero me olvide de otra persona… Haruko… ¿Podrás perdonarme?-

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Haruko caminaba por las calles de Madrid, esperando encontrarse con la chica miembro de los White Tiger X, Mao, si bien aún estaba un poco resentida con sus excompañeros de equipo, ella no tenía nada en contra de su mejor amiga de cabello rosa así que después de Roma ambas acordaron verse un rato antes de que comenzaran de nuevo sus respectivas batallas, Haruko doblo en una esquina como había indicado a su amiga para encontrarse, su sorpresa fue bastante al encontrarse al chico de cabello negro, camisa china blanca y pantalones negros:

-Rey…- dijo sorprendida -¿Dónde está Mao?- se limitó a preguntar por su amiga ya que el chico era su capitán

-Ella no vendrá… - le contestó – Me ha pedido que tome su lugar…- y Haruko lo miro con una cara de desconfianza, Rey suspiró –Yo… Quería hablar contigo…-

Ella lo dudó un momento pero después de todo Rey merecía que ella le diera una oportunidad de explicarse a sí mismo, la llevó hasta una fuente en una plaza central y ahí se sentaron a charlar:

-Escúchame… Sé que no hay palabras para decir esto… Pero… Quiero que sepas que si deje el equipo fue porque quería probarme a mí mismo quería saber si podía vencer a Takao... Honestamente creo que me deje llevar por el título de Takao… Y me olvide de ti… Hasta que vi a Takao abajo… No lo sé, quiero probarme a mí mismo con las personas que considero las mejores en Beyblade… Que vendrían a ser ustedes… Perdóname por darme cuenta hasta ahora…-

-No importa…- le dijo ella poniéndole una mano en el hombro y cuando Rey volteó le dio un cálido abrazo – Ahora entiendo muchas cosas que antes no podía comprender del todo… Gracias por explicarme…- Y así Rey le devolvió el abrazo

-Entonces… ¿Estamos bien?- le preguntó Rey una vez se soltaron

-Ya lo creo… Pero…- ella se quedó pensando y Rey puso una cara de preocupación – Espero que algún día podamos Bey batallar como se debe… - le dijo con una sonrisa en la cara

-Estaré esperando aquel momento…- le dijo igualmente sonriendo y después ambos se echaron a reír.